Lo primero que tienes que tener en cuenta es que no todos los productos de inversión son iguales. Por tanto, el plazo para reclamar el producto que en el que invirtieras va a depender del producto en sí.

¿De qué depende el plazo para reclamar un producto de inversión?

Este tipo de productos tienen un plazo de caducidad normalmente de cuatro años. Por tanto, si adquiriste este productos hace más de cuatro años, lo más probable es que haya caducado y no puedas reclamarlo.

Si todavía estás a tiempo, lo mejor es que inicies la reclamación cuánto antes porque así dejará de contar ese plazo y podrías recuperar tu inversión.

En resumen, cuando reclamamos alegando la nulidad del contrato (reclamamos porque no se conocía lo que implicaba el producto) el plazo es de cuatro años. Hay que contarlo desde que uno tiene conocimiento de lo que realmente se contrató.

¿Por qué reclamamos en un producto de inversión?

Como hemos indicado, en este tipo de productos lo que se reclama es la nulidad del contrato. Esto es así ya que normalmente el consumidor no conocía lo que implicaba realmente suscribir este producto.

Es muy importante tener un perfil de consumidor para poder reclamarlo. Los perfiles de inversores o con un perfil financiero más avanzado en principio no tendrían derecho a reclamar, ya que se considera con la formación suficiente para invertir en un producto con este tipo de riesgo.

Nota: para poder reclamar este tipo de productos necesitas tener un perfil de consumidor.

Si no tienes claro si puedes reclamar o no, puedes aportarnos toda la documentación que conserves y te diremos si puedes reclamar o no.