Cuando se produce el despido de un empleado, dicho despido puede ser calificado de procedente, si la decisión se ha tomado por causas correctamente justificadas; de improcedente, si no se han cumplido los requisitos formales o no está adecuadamente argumentado; o despido nulo.
En este post, nos vamos a centrar en conocer un poco más en las causas y las consecuencias de un los despidos nulos. En este sentido, se habla de despido nulo cuando la decisión del empresario se hace en base a una serie de aspectos discriminatorios recogidos en la Constitución Española o en otras leyes, o cuando atenta contra los derechos fundamentales o las libertades públicas de ese empleado.
Si el despido se justifica por motivos diferentes al embarazo o a los permisos y excedencias que se mencionan en los anteriores apartados, entonces el despido no podrá ser calificado como nulo.
Las principales consecuencias de un despido nulo son las siguientes:
En caso de que el empleado considere que su despido se encuentra entre estos supuestos, deberá demandar a la empresa por despido nulo en el plazo de 20 días.
Para ello, deberá presentar una papeleta de conciliación en el Servicio de Mediación, Arbitraje y Conciliación (SMAC), con el fin de concertar una cita para el Acto de Conciliación. Si durante el acto no se llega a ningún acuerdo, el trabajador deberá acudir al Juzgado de lo Social para solicitar un juicio donde su despido pueda ser declarado como nulo.
Descubre en qué ocasiones puedes reclamar daños morales a tu aerolínea
Las tarjetas revolving son un tipo de tarjeta de crédito que ofrecen los bancos, pero…
Hoy, 25 de abril, hemos conocido una nueva sentencia del Tribunal de Justicia de la…
Una situación que se produce más habitualmente de lo esperado es como las aerolíneas, ante…
¿Cuáles son los errores más frecuentes que cometemos los viajeros y viajeras cuando estamos en…
Las tarjetas revolving pueden ser una trampa para tu estabilidad financiera. Con su aparente comodidad…